Nuestra Iglesia " Diócesis de Pasencia"

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lunes, 17 de enero de 2011

Comunicado del Encuentro bilateral de la HOAC y de la LOC

La Hermandad Obrera de Acción Católica - HOAC de España y la Liga Operaria Católica – LOC-MTC de Portugal, movimientos de trabajadores cristianos, nos reunimos en Cáceres los días 13 y 14 de enero para analizar conjuntamente la vida y la acción de los dos movimientos y la situación del mundo obrero y de la Iglesia en nuestros dos países.

Analizada la realidad actual, consideramos que son muy parecidas las dificultades en que se encuentran los trabajadores y sus organizaciones en nuestros dos países y compartimos las mismas preocupaciones respecto al futuro, marcadas por la orientación neoliberal de las políticas de nuestros respectivos gobiernos, que han sucumbido ante el empuje conservador procedente de la Unión Europea y de la avaricia y codicia de los mercados financieros.

El paro masivo -en España el 20,6% de la población activa-, el empleo precario, la flexibilidad laboral, la movilidad geográfica, la siniestralidad laboral, los bajos salarios y pensiones, el endeudamiento de las familias, las recientes reformas laborales en España y en Portugal, la privatización de los servicios públicos, las graves deficiencias en el funcionamiento de la asistencia sanitaria y en la seguridad social; juntamente con el recorte en las prestaciones para atender las situaciones de dependencia y con la pretensión del alargamiento de la vida laboral en España de 65 a 67 años, son situaciones que están sufriendo las trabajadoras y trabajadores y sus familias, y que cuestionan las bases de la organización social y del propio sistema democrático.

Asimismo, la desconfianza en las organizaciones de los trabajadores, fomentada por los poderes económicos y por diferentes medios de comunicación, el debilitamiento de la acción sindical y de la articulación de posibles respuestas, el aumento de personas que viven bajo el umbral de la pobreza, las dificultades de los jóvenes, las mujeres y los mayores de 45 años para encontrar trabajo, la restricción de los derechos de las personas inmigrantes y las consecuencias de todo ello para las familias trabajadoras, son grandes preocupaciones sentidas por los dos movimientos.

Respecto a la situación de la Iglesia, constatamos que, en nuestros dos países, la Iglesia está haciendo una labor de asistencia a las víctimas de la actual crisis económica. En algunas diócesis españolas se ha constituido un Fondo para fomentar proyectos de empleo y algunos obispos han realizado manifestaciones y gestos de solidaridad con los pobres. Destacamos la labor desempeñada por Cáritas como institución asistencial de las necesidades de los pobres. Valoramos la “Declaración ante la crisis moral y económica”, que los Obispos españoles hicieron en el noviembre de 2009. Pero vemos con preocupación que, ante la gravedad de la situación descrita, no se difundan mensajes de anuncio y de denuncia, de cercanía y esperanza con las personas que sufren.

Los movimientos de trabajadoras y trabajadores cristianos, fieles al mundo obrero, continuamos desarrollando nuestra actividad a nivel nacional, europeo y mundial. Nuestra acción está centrada en la humanización del trabajo, como bien para la realización del ser humano. Analizamos las posibilidades de acción y difusión de la “Carta para las familias” que se adjunta, donde se reivindican los derechos familiares de las personas y los derechos sociales de las familias.

Con fe en Jesucristo y la certeza de su mensaje de esperanza, la HOAC y la LOC-MTC continuaremos estos encuentros, que tanto han contribuido al conocimiento de nuestra realidad y al desempeño de la misión que nos une: dignificar el mundo del trabajo y construir una sociedad humanizada, junto a otros hombres y mujeres de buena voluntad, de acuerdo con el proyecto de Jesucristo, que para nosotros se concreta en vivir las Bienaventuranzas.

Cáceres 15 de enero de 2011

LOC/MTC y HOAC

miércoles, 5 de enero de 2011

10.000 extremeños dejarán de cobrar el paro de 426 euros desde febrero

((DE INTERES Iglesia en Plasencia)

La supresión a partir de febrero del subsidio final de los parados, que asciende a 426 euros, dejará a 10.000 extremeños sin ingreso alguno que llevarse a casa. La crisis económica ha provocado en nuestra región la pérdida de miles de empleos, situándola como la novena región europea con más paro (20,5 %) con un total de 119.636 trabajadores desempleados y el 30% de ellos sin cobertura por desempleo, a este problema se agrava ahora, de no mediar medidas efectivas que lo sustituyan con ventaja, la supresión del subsidio de 426 €, a los parados de larga duración que tienen cargas familiarices, o de los que prácticamente carecen de la posibilidad de encontrar cualquier empleo, ni bueno ni malo.
Esto supone dejarles en la estacada y deberán ser asistidos desde los servicios sociales o por entidades benéficas. Desde las distintas Cáritas diocesanas se advierte que la retirada de estas ayudas aumentará la pobreza y la demanda de sus servicios sociales, que en el caso de las de nuestra región han supuesto este año que termina una subida de un 77% más en la ayuda a las familias necesitadas. Como sociedad civil, como Iglesia es necesario denunciar que no se puede estar de acuerdo con esta medida y afirmar que ni la justicia ni la solidaridad pueden permitir que se siga empujando a cientos de ciudadanos hacia la pobreza y los márgenes de la sociedad. Dar a cada uno lo suyo”, (Justicia), es decir, siquiera lo que es el mínimo en cuanto a necesidades básicas del ser humano, y “Compartir los bienes comunes” (Solidaridad), es decir, siquiera plasmar en medidas básicas la función o hipoteca social que recae sobre la “riqueza” privada o pública, ha de ser una obsesión moral para la gente de bien.
La doctrina social de la Iglesia ante situaciones como las actuales nos recuerda que hemos de trabajar por un modelo de relaciones económicas y sociales justo, que reconozca la dignidad de la persona y responda a las necesidades de los más empobrecidos.